Administrador: Jaime Galán Rueda jaimegalanrueda@yahoo.es

viernes, 29 de enero de 2010

EL VENENO DE SEVILLA...




Relevo de la cuadrilla de Loreto

Histórica foto de la Virgen del Loreto. Está montada en su paso, sin palio y con los candelabros del paso del Señor.

Foto antígua de la cuadrilla de la Virgen de Loreto

Igualá del Paso de la Virgen de Loreto 2010


Que Sevilla es la cuna de la Semana Santa no es ningún secreto, y Sevilla en cualquier día del año huele a Semana Santa, a cofradias, a incienso, a primavera, a costal...
De esto pude darme cuenta el martes nada más bajarme del coche, a escasos metros de donde había aparcado me topé con la iglesia de San Benito, y al pasar, la Virgen de la Encarnación, expuesta en el Altar Mayor, parecía darme la bienvenida a lo que sería un día dificil de olvidar.

Tras saludar a la Encarnación, rezar ante el portentoso cristo de la Sangre y presentarle mis respetos al que en pocos días será Presentado a Sevilla, puse rumbo al centro de esta magnífica ciudad. El centro de Sevilla por estas fechas está lleno de cofrades que hablan sobre igualás, ensayos, pasos, costales, y es que en Sevilla, todo el año es Semana Santa.

Por los aledaños de la catedrál me reuní con mi amigo Macareno Rafa Rios, y como no podía ser menos, fuimos juntos a presentarle nuestro respeto, cariño y devoción a la madre de Sevilla, a la esperanza de las Esperanzas, a la Esperanza MACARENA¡¡.

Cuando uno entra en la basilica de la Macarena, automáticamente, los problemas, las inquietudes y los pensamientos se van, y solo queda en la cabeza "Ella", la que mora en San Gil, la que guarda y protege a la ciudad de Sevilla y a toda su gente. Cuando te pones frente a frente con la Esperanza, solo existe alegría en el corazón de quien la contempla. Y junto a Ella, el Señor de la Sentencia, ese rostro sereno que refleja a la perfección la humildad del hijo de Dios.

Con el nudo en la garganta aún y después de comer croquetitas de bacalao en la freiduría “la Esperanza” (jejeje) pusimos rumbo a la alfalfa, a la igualá de la Virgen de Loreto.
Para el que nunca halla estado en la igualá de un paso en Sevilla, les diré que es algo totalmente distinto a lo que podemos ver aquí en Linares, cientos de personas se amontonan en torno al capataz y siguiendo un riguroso orden, van entrando los costaleros palo por palo, cuadrilla alta, cuadrilla baja, cuadrilla de aspirantes, todos ansiosos de salir bajo el manto de Loreto, y eso es algo difícil de ver lejos de ésta ciudad.

La sensación que sentí al verme en una fila de 9 personas para cubrir un solo hueco es difícil de explicar, pero el desanimo se adueñó de mí hasta que escuché la voz de Manuel López diciéndose a sí mismo en voz baja pero que pude oír claramente “la altura de este me viene del carahoo” y a continuación en voz alta a su segundo, “bola, al chaval este de LINARES me lo metes en cuarta que se va a hinchar de Loreto este año”, y ahí el desanimo se transformó en alegría, la alegría de un costalero que acaba de entrar a formar parte de la gran cuadrilla de la Virgen de Loreto.

Y tras unas cervecitas en el bar de enfrente para celebrarlo, tocaba ir a casa a cenar y hablar de cofradias con Rafa y con Pilar. (Hay que ver lo que se puede llegar a aprender de la Semana Santa de Sevilla con Rafa…)

Desde aquí darle las gracias a mi gran amigo Rafa Rios, porque sin él no hubiera sido posible entrar en la cuadrilla el primer año que me presentaba a la igualá de San Isidoro, y no solo agradecerle ese esfuerzo que ha hecho por mi, si no también agradecerle el cariño y la hospitalidad con la que él y su novia Pilar me han tratado, solo tengo buenas palabras hacia ellos y ojala algún día pueda devolverte el favor amigo, un abrazo¡¡¡ nos vemos el jueves que viene en el primer ensayo.

2 comentarios:

  1. Soy de los que piensa que todo sevillano, desde su nacimiento, debería de estar obligado por contrato a ser el mejor cicerón de la ciudad. Yo, a fe que así lo intento. Y si en mi mano estaba poder ayudarte a entrar en Loreto, así lo he hecho, como en su día lo hice por Agustín en la Bofetá.

    Como me inculcó mi padre, desde pequeñito: ¡Hacer felices a las personas es muy sencillo, solo hay que quererlo! Y en eso estamos, en cumplir las enseñanzas de mi padre.

    Un abrazo y felicidades.

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  2. Y tanto Rafa, y tanto que me has ayudado a cumplir un sueño y a ser un poquito feliz en estos tiempos tan duros que corren, de nuevo muchas gracias por ser tan buena persona, tan buen cristiano y mejor amigo¡¡¡

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