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miércoles, 25 de noviembre de 2009

SOLEMNIDAD, SILENCIO Y RESPETO



Hermandad de la mortaja entrando en su templo. Para mi es uno de los momentos mas solemnes, tristes y respetuosos de toda la semana santa sevillana,un gozo para los sentidos y un llamamiento al recojimiento y la meditación.



Quise romper a llorar, y no pude… ¡Caer de rodillas para besar la tierra bautizada con la Sangre del Calvario, y no supe hacerlo… Todo lo que se me ocurrió fue echar a andar hacia el Cristo como si una fuerza irresistible me arrastrara hacia Él; llegar al «paso»; agarrarme a una de las maniguetas, y no apar - tarme ya de Él en todo lo que restaba de estación.



En esta noche en las que dicen que San Lorenzo llora sus lágrimas por el firmamento, sale de San Lorenzo,La virgen de la Soledad, del barrio más puro de Sevilla... La Virgen va transida de dolor, del dolor de la soledad, del dolor más real y aparente de todos los dolores... Va casi sola en su dolor. Silencio, fin, agotamiento. Los hermanos de la Soledad lloran esta soledad en que camina su Virgen. Las sillas se apilan informes, contra las aceras. No los miran, Por entre la sombra y el silencio de las calles van con Su Virgen de la Soledad, en soledad. ¡Bendita sea!"



Has querido Señor, que aquí estuviera.
Que viniera esta noche a contemplarte
en el blanco sudario donde mueres
aguardando la luz del día tercero.
Has querido que fuera mi palabra
la que rasgara el velo de silencio
que edifica tu cuerpo sin latido
y así surcara a tientas la penumbra
donde reluce a solas tu blancura.

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